Argentum, junto con Aurum, es uno de los dos perros autómatas guardianes de Reyna. Argentum es el perro de plata y tiene rubíes por ojos. Pueden detectar si una persona miente o no. Si la persona miente, Argentum y Aurum le atacan.
Los héroes del Olimpo
El hijo de Neptuno
Si bien no tienen un papel importante en el libro, Argentum y Aurum siguen Reyna las veces que ella habla con Percy a solas. Parece que no sienten mucho cariño hacia este, ya que están gruñendole casi todo el tiempo que están en la misma habitación que él. Reyna le advierte de que pueden saber cuando las personas no dicen la verdad y que odian a los mentirosos.
La Marca de Atenea
Aurum y Argentum están con Reyna cuando esta habla con Annabeth, antes de que empezaran a hablar, Reyna le pidió que si podían acompañarlas sus perros, aunque sonó más a afirmación que a pregunta. Seguramente se los llevó con ella para asegurarse de que Annabeth no le mentía. Más tarde, vuelven a encontrarse, y sus perros la acompañan.
La sangre del Olimpo
Argentum y Aurum.
Aparecen protegiendo a Reyna, Nico y al entrenador Hedge, cuando se encontraban en la Casa del Fauno, en Pompeya. Atacó a uno de los fantasmas de barro, pero tuvo menos suerte que Aurum, ya que quedó con la cabeza girada en cuarenta y cinco grados y sin un ojo. Después de proteger la Atenea Partenos, se esfumó junto con Aurum.
Más tarde, vuelve a aparecer con Aurum cuando Nico, Reyna y Hedge llegan a Portugal. Cuando Reyna lo ve, sige con la cabeza girada y sin el ojo. Allí, los dos autómatas defienden a los tres de los lobos, liderados por Licaón. Al ser de plata, cuando atacaba a los lobos les hacía daño, a diferencia de Aurum, que al ser de oro no podía hacerles daño. Después de eso vuelven a esfumarse.
Trivia
- Aurum es el único autómata en ambas series que está completamente hecho de plata.
- Argentum y su contraparte, Aurum, pudieron haber sido sacados del modelo de plata y oro de los perros guardianes del rey Alcinous, mencionados en el Libro Ocho de La Odisea.
- Argentum significa plata en latín.
- A Argentum no se le considera un arma ya que se le permite entrar en Nueva Roma, pero Annabeth notó que Aurum y Argentum podían atacar fácilmente a alguien con sus dientes de metal afilados.
- Al ser de plata, puede hacerles daño a los licántropos.